Acudir a profesionales en salud mental es clave para el tratamiento, también dedicarse un tiempo para la autovaloración.
Es poco usual ver en el rostro de la embajadora con Propósitos de Relatos Esmeraldeños, Wendy Angulo, alguna expresión de enojo, más bien, siempre tiene dibujada una sonrisa y cuando se le pregunta ¿cómo está su estado de ánimo? responde con naturalidad: “estoy más positiva que la prueba de embarazo de un pobre”.
Su respuesta incluye una carcajada, pero revela que, no siempre está así. Dice que uno de los temas que marcó en su vida fue la muerte de su papá, con quien tenía un estrecho lazo de confianza. Recuerda que esa pérdida le provocó tanto dolor que se encerró en su casa, dejó de sonreír e incluso empezó a sentir los efectos de la depresión, como estar irritable incluso con sus hijos y esposo.
“Con la muerte de mi padre entré en un estado de depresión terrible, por eso ahora les comparto tres tips que me ayudaron a salir de depresión. Primero tener más cercanía con Dios, yo oraba todos los días al filo de mi cama; segundo, no aislarse, yo lo hice, y al tocar fondo me dije: ‘Wendy Angulo, tienes que volver a brillar’ y tercero pedir ayuda profesional”, recomendó la Embajadora, quien es parte activa de la campaña contra la depresión ‘Ánimo, estamos contigo’, que impulsa este medio de comunicación, Relatos Esmeraldeños.
Dentro de la campaña contra la depresión ‘Ánimo, estamos contigo’ que impulsa este medio de comunicación, Relatos Esmeraldeños, se tiene la alternativa de llamar a la línea gratuita 171 opción 6 del Ministerio de Salud Pública del Ecuador y solicitar cita con psicólogos o psiquiatras que ayudarán en la contención de la enfermedad que no discrimina condición social o género.
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